El gripado del motor es la avería más grave

No hay avería más temida (y con razón) que el gripado del motor. Este fallo puede dar al traste con un motor aparentemente 'sano' y aunque hay más causas el desencadenante más frecuente es un problema de lubricación.

Decimos que el motor se gripa cuando ha alcanzado una temperatura excesiva, de forma que algunas piezas de metal pueden llegar a fusionarse. Las causas más frecuentes del gripado de un motor son fallos en el lubricante (si el aceite no llega en la cantidad suficiente se agarrotarán camisa y pistón por falta de lubricación), en la refrigeración (si no hay suficiente líquido refrigerante o está adulterado o el circuito está sucio el motor no aliviará parte del calor generado) o desequilibrio de bielas (un cigüeñal mal equilibrado puede producir un mayor roce y un calentamiento excesivo).  

Pero que sea la avería más grave no significa que no se pueda prevenir. La mejor forma de evitar que el motor del coche gripe es prestar mucha atención al mantenimiento preventivo; con especial cuiado a los indicadores de temperatura y revisando que los niveles de aceite y refrigerante sean los adecuados y haciendo los cambios según sea pertinente.

Y un último consejo: ante cualquier señal de alerta o ruido fuera de lo normal acudir a tu taller de confianza.