Consejos útiles para evitar suspensos en la ITV

¿Ha llegado el momento de llevar tu coche a la ITV? Recuerda que si tiene más de cuatro años, debes acudir a realizar esta inspección cada dos años. Si tiene más de diez, la revisión debe ser anual.

Cuando vamos a esta inspección, es un fastidio tener que repetirla por algunos fallos que podríamos haber corregido antes si hubiéramos prestado un poco de atención al coche. Así que toma nota de algunas comprobaciones muy sencillas que puedes hacer antes de pasar la ITV de tu coche para evitar que te envíen de vuelta con la inspección desfavorable.

- Nivel de aceite: debes comprobar que se encuentra entre el máximo y el mínimo de la varilla medidora.

- Luces: te llevará cinco minutos verificar que funcionan correctamente las luces largas, las de cruce, las de posición y los intermitentes. Si te ayuda alguien, también puedes chequear las de freno y la de marcha atrás.

- Claxon: acciónalo. ¿Suena como siempre? Perfecto, no debes preocuparte más de él.

- Limpiaparabrisas: acciónalos también y comprueba que funcionan bien. Asegúrate de que hay líquido lavaparabrisas suficiente.

- Neumáticos: debes comprobar que están en buen estado y que la presión es la correcta.

- Cinturones de seguridad: los anclajes deben funcionar correctamente, algo que puedes comprobar abrochándolos y desabrochándolos.

- Cuadro de instrumentos: ¿alguna lucecita encendida que no debería estarlo? Acude a tu taller de confianza para que le echen un vistazo. Si, por ejemplo, tiene que ver con un problema con las emisiones del vehículo, seguramente no pasarás la ITV.

Recuerda llevar a la inspección la documentación del vehículo: la tarjeta de inspección técnica, el permiso de circulación y también es aconsejable llevar el último recibo del seguro.

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Fuente: RACC.