Cómo colocar los retrovisores para reducir el ángulo muerto

Ya sabes que los ángulos muertos en los retrovisores son un riesgo al conducir. Pueden hacer que no veamos a otros vehículos que se aproximan y ponernos en peligro si decidimos hacer una maniobra como, por ejemplo, un cambio de carril.

Por eso es importante seguir algunos consejos para colocar correctamente los espejos retrovisores y reducir el ángulo muerto a la mínima expresión:

- Coloca el asiento: esto es lo primero que debes hacer, ya que de la colocación del asiento dependerá la de los espejos. Hazlo con la espalda totalmente apoyada en el respaldo y comprobando que el pie izquierdo hace todo el recorrido del pedal del embrague sin problemas. Los brazos deben estar ligeramente flexionados para sujetar correctamente el volante.

- Coloca el espejo central: ¿ya estás bien sentado? Pues coloca el espejo central en el centro de la luneta trasera, de tal forma que puedas verla por completo.

- Coloca el espejo izquierdo: una vez asegurada la cobertura de la luneta trasera, toca colocar el espejo lateral izquierdo, que siempre debe apuntar al horizonte. Una vez colocado a una altura media que permite ver la carrocería del vehículo, debes abrirlo poco a poco para que la parte visible del vehículo sea la menor posible. Al lograr que desaparezca el lateral en el punto adecuado, reducirás al mínimo el ángulo muerto.

- Coloca el espejo derecho: sigue los mismos pasos que con el izquierdo.

De esta manera, maximizarás la visibilidad de lo que ocurre por detrás de ti en la carretera y, al mismo tiempo, minimizarás el riesgo de accidente.

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Fuente: Mapfre.