La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) nos ayuda a asegurarnos de que nuestro coche cumple con las normativas y condiciones de seguridad establecidas. Antes de llevarlo a la inspección, eso sí, conviene realizar una revisión exhaustiva para evitar tener que repetirla. Aquí tienes una lista con elementos que se deben comprobar antes de acudir a la ITV:
- Neumáticos: verifica la presión de inflado y el estado de tus neumáticos. Comprueba la profundidad del dibujo, si hay desgaste irregular, cortes o ampollas que puedan afectar su rendimiento y seguridad.
- Frenos: conviene revisar todo el sistema de frenado, incluyendo pastillas, discos o tambores, el circuito y el nivel del líquido de frenos. Un nivel bajo podría indicar una fuga o desgaste excesivo. En tu taller de confianza pueden encargarse de hacer esta comprobación.
- Escape: comprueba que no haya fugas y observa el color del humo que emite. Antes de la ITV, circula durante al menos media hora para calentar el sistema de escape y limpiarlo de carbonilla.
- Aceite: verifica el nivel de aceite con el vehículo en una superficie plana y en frío. La varilla debe estar libre de restos de aceite, y la marca debe quedar entre el máximo y el mínimo. Ajusta el nivel si es necesario para evitar problemas graves.
- Limpiaparabrisas: asegúrate de que el depósito esté lleno de agua o líquido limpiador. Verifica el estado de las escobillas delanteras y traseras, y sustitúyelas si presentan grietas o pérdida de elasticidad.
- Batería de arranque: observa la fijación al bastidor, busca fugas de electrolito y revisa el estado de los bornes y conexiones.
- Luces: asegúrate de que todas las luces funcionan correctamente, es decir, las luces de freno, intermitentes y faros. Verifica también el alineado de las luces de los faros para una visibilidad óptima.
- Carrocería: presta atención a posibles oxidaciones, corrosiones, roturas y defectos en las fijaciones exteriores del vehículo. Revisa el estado de los cristales, espejos y el correcto funcionamiento de las puertas.
- Interior: inspecciona los cinturones de seguridad en busca de cortes o desgastes, asegúrate de que la hebilla ancla correctamente y que se recoge sin problemas. Verifica el estado de los asientos y el funcionamiento correcto de los testigos luminosos.
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Fuente: Car and Driver.